Tienes casi 30 años y estás pensando en volverte independiente. ¿por fin vas a salir de casa de tus papás?

A todas nos ha pasado por la mente el querer tener un espacio propio para sentirnos independientes, realizadas, libres y seamos honestas… dejar de reportar todos nuestros movimientos a los papás.

OK, ¿Qué debemos hacer para dar el gran paso?

1.- Location, location, location…

No importa si contratas a tu amiga que trabaja en bienes raíces o te pones a buscar en las plataformas de internet, mudarte puede implicar una búsqueda exhaustiva de departamentos/casas en renta. Lo mejor que puedes hacer para empezar es filtrar todo de acuerdo con lo que necesitas.

¿En qué zona quieres vivir? ¿Cuál es tu presupuesto? ¿Te alcanza para vivir en ese lugar o se volverá un sacrificio económico vivir en esa colonia?

Toma en cuenta la seguridad de la zona en donde vas a vivir. Es muy importante que te sientas segura si necesitas salir a comprar algo, caminar o simplemente dejar tu coche fuera sin que tengas la preocupación que le puede pasar algo.

 

2.- ¿Es momento de romper el cochinito?

Cuando decides independizarte debes conocer tus posibilidades económicas. ¿Tienes ahorros? ¿Cuánto puedes aportar mensualmente a una renta? ¿Tus gastos los compartirías con alguien más o te gustaría vivir sola?

No dejes de considerar:

Costo de la renta: Es sin duda uno de los puntos más importantes, sin embargo, no olvides sumar también los costos de mantenimiento y servicios como luz, agua y gas. También el costo de muebles y adornos, renta de televisión por cable, internet (WiFi), comida, artículos de limpieza y todos los gastos pequeños que sumados se convierten un poco más de lo que creías.

Tamaño y diseño: Es importante que veas el lugar físicamente porque los metros cuadrados pueden llegar a ser engañosos debido a la distribución y diseño de los espacios (el tamaño sí importa). Necesitas un lugar que sea apropiado para que tú, o tus roomies y tú, tengan suficiente espacio privado y áreas comunes para convivir.

 

 

3.- Eligiendo a la roomie ideal

Tomar la decisión de mudarte con alguna amiga es algo que debes pensar bien, ya que será la persona con la cual compartirás tu vida y espacio vital por los siguientes meses o años. Asegúrate primero que ella cuenta con los recursos económicos suficientes para poder compartir los gastos; pero, sobre todo, es importantísimo que conozcas sus hábitos y estilo de vida porque, si son incompatibles en muchas cosas, a la larga puede ocasionar problemas.

Elegir una amiga con quien tienes mucha confianza es lo mejor, pero recuerda que a veces mudarse con tu mejor amiga puede llegar a ser un poco absorbente y podría llegar a afectar la relación. Finalmente, lleguen a un acuerdo mutuo y establezcan ciertas reglas de convivencia para poder llevar la fiesta en paz. ¿Y si en lugar de amiga, eliges a un amigo como roomie? Esa es otra historia…

Tener como roomie a un hombre en lugar de una mujer implica algunas reglas extras, sobre todo para sentirte más segura de que se respeta tu privacidad. Por supuesto que cuando eliges a un hombre es porque es tu mejor amigo, es la persona de tu mayor confianza o algún miembro de tu familia, pero considera que aún así, algunas cosas cambiarán en la forma en la que vives. Quizás no saldrás tan cómoda de tu habitación en fachas o llegar sudando luego de salir a correr y hacer ejercicio. También pudiera ser que él tenga una relación y su pareja desconfíe de la razón por la que ustedes eligieron vivir juntos. ¡Cuidado con los celos! Y si te importa mucho el qué dirán, ¡mejor ni lo pienses!

 

4.- Prepárate para nuevos hábitos

A veces estamos acostumbradas a tener una vida fácil y cómoda en casa de nuestros papás. Vivir solas hará que nosotras mismas cocinemos, limpiemos etc. Procura que tus hábitos de consumo y de alimentación sean sanos para tu salud y sustentables para el planeta.

Será importantísimo mantener cierto orden y limpieza para evitar que vivas en un espacio desorganizado y sucio. Y si compartes el hogar, tendrás que adaptarte también a los hábitos de las demás. Cediendo un poco entre las compañeras de hogar podemos evitar algunos malos ratos con quien es nuestra mejor amiga.

Si tienes mascota y quieres llevarla contigo, tu roomie tendrá que estar de acuerdo también. No olvides comentar esto antes de mudarte

Salirte de casa de tus papás puede ser una decisión difícil, pero si tienes las ganas y los recursos necesarios para hacerlo, no lo pienses más…hazlo… ¡No te arrepentirás!